jueves, 26 de mayo de 2016

El vientre materno...desde mi realidad.

Estoy viviendo una etapa en la que estoy rodeada de futuras mamás, será la edad seguramente...
Mi intención con este post no es dar una lección a nadie, ni mucho menos hacer sentir mal a ninguna mamá, porque cuando las cosas se hacen por desconocimiento...no cabe el sentimiento de culpa, porque no existe intención alguna. Pero desde que estoy indagando en este mundo tan extraordinario del alma, soy consciente de que no vivimos el embarazo con la importancia que verdaderamente tiene ya para nuestro bebé, a la mayoría las veo cometiendo los mismos errores que han cometido nuestras anteriores generaciones, por desconocimiento y por falta de conexión con nuestra alma...y es una lástima que con la información que tenemos a nuestro alcance...sigamos viviendo en la ignorancia.
Y seguramente muchos se estén preguntando...¿por qué habla esta chica con tal seguridad del tema? Pues la respuesta es fácil y simple...he tenido el regalo de revivir y sentir mis nueve meses de embarazo y mi propio parto gracias a una de las regresiones que he tenido el placer de experimentar, y gracias a ella he adquirido un conocimiento a través del cual veo el proceso del vientre materno y el posterior parto, desde otra perspectiva.
No les voy a engañar...aún tengo muchas dudas sobre el tema, sigo aprendiendo día a día, y con cada duda logro avanzar un poquito más...así que espero que las dudas nunca acaben de disiparse...pero en el tema del vientre materno puedo hablar desde mi propia experiencia y evidencia, por lo que no les puedo afirmar que sea verdad, pero sí que afirmo que es mi verdad y mi realidad vivida.
A día de hoy, estoy totalmente convencida de que el período de vientre materno está compuesto por dos seres, dos almas independientes, pero unidas durante todo el proceso de gestación por el estado emocional de mamá, es decir, las emociones que el bebé siente no le pertenecen, son de mamá...y lo afirmo con tal rotundidad, ya que durante mi regresión pude sentir cada emoción y sensación que tenía mi mamá, y debido a ello no quería nacer...no quería nacer porque venimos de un lugar maravilloso, un lugar donde todo es paz, armonía, amor incondicional...y de repente, cambió ese hábitat y me conecté a un estado emocional terrenal, un estado emocional donde no todo era paz, armonía y amor incondicional, sino que aparecían otras emociones como la tristeza, la decepción, la carencia de afecto, la soledad...y todo ello se combinaba por supuesto con amor, alegría, felicidad...pero debido a que las sensaciones y emociones negativas no eran agradables, apareció el miedo, el rechazo a lo desconocido...y entonces decidí no nacer, quería volver a mi hogar, porque éste no era mi hogar, este lugar es un aprendizaje, es una experiencia de vida dentro de la vida, pero el verdadero hogar está antes del nacimiento y después de la muerte...y a raíz de todo esto compliqué mi parto, porque no ayudaba a salir, sino que intentaba frenarme dentro del vientre de mamá, impidiendo mi salida...y debido a ello durante unos segundos mi parto se complicó, pero finalmente nací, porque una enfermera apretó con fuerza el vientre de mamá y no pude retenerme más, y nací...morada por quedarme retenida y casi sin oxígeno, pero nací...y estoy agradecida por haber sido valiente y haber venido a vivir la experiencia de vida que estoy viviendo, porque es un regalo experimentar tantas emociones y sensaciones a pesar de que en ocasiones sean desagradables, porque son emociones que sólo se pueden vivir a través de un cuerpo físico y es un regalo que en muchas ocasiones olvidamos. Gracias a ese gran trabajo he podido hablar con mamá de emociones que sentí, tener evidencias de que realmente existe el alma, he podido contrastar emociones que yo desconocía porque no recuerdo mi propio embarazo al igual que nadie, y por ello no tenía constancia de sus emociones en esos nueve meses...pero me ha servido para ser consciente de que muchas de mis emociones nunca me han pertenecido, siempre han sido de mamá, pero no era consciente hasta entonces, así que estoy muy agradecida a la terapia regresiva, ya que me ha ayudado mucho para poder diferenciar las emociones que no me pertenecían y las que me pertenecen a día de hoy.
Puede parecer un poco complicado, pero en realidad es algo muy simple...desde el momento de la concepción, el alma del bebé conecta con la madre, y según van pasando las semanas la conexión es cada vez mayor hasta que es total y el bebé pasa a estar regido por el sistema emocional de mamá, es decir, si mamá está feliz, el bebé sentirá dicha felicidad, si mamá está triste, el bebé sentirá dicha tristeza...pero ninguna de esas emociones será del bebé en realidad, las emociones siempre serán de mamá...y les aseguro que es necesario hablar con el bebé, es necesario explicarle las situaciones que generan dichos cambios emocionales, es importante explicarle que todo lo que siente pertenece a mamá, es importante darle tranquilidad, seguridad, protección y todo a través del diálogo, porque hay que tener una relación desde el minuto uno con el bebé, hay que conectar con él y ofrecerle el protagonismo que le pertenece, es importante que la mujer en esos nueve meses sea consciente de que el bebé siente a través de ella y eso es una gran responsabilidad, ya que puede que toda su vida se vea condicionada por emociones que no le pertenezcan...y la solución es tan fácil, que es una lástima no llevarlo a cabo.
Y sobretodo lo que creo que es muy importante es que los médicos tengan mucho más tacto a la hora de ayudar a venir bebés al mundo, porque la frialdad con la que me trataron, el poco amor que me desprendieron como profesionales, la poca sensibilidad...no es lo que más necesitaba al vivir posiblemente el momento más traumático de mi experiencia de vida hasta el día de hoy...salir a este mundo terrenal donde el amor incondicional escasea.

2 comentarios:

  1. Bueno......Genial!!yo la verdad que no e tenido la suerte de poder revivir mi parto ni nada de eso....me parece increible todo esto.....los bebes experimentan las emociones de la madre.....pero imagino que una embarazada no puede estar feliz las 24 horas del dia durante los 9 meses,asi que es normal que no quisieras nacer.....jajajaja yo la verdad.....no se.....a veces pienso.....mejor haberme quedado de donde venimos!jajajajja es coña.......pero muchas mujeres tienen hijos para satisfacer sus necesidades....no se si me explico.....simplemente por llenar algun vacio,ya sea aburrimiento....o que todas sus amigas le comen la cabeza,etc etc......creo que hay que estar segura.....y yo como no lo estoy.....pues nada.....si sera muy maravilloso todo.....pero mis emociones son una montaña rusa,mi bebe saldria desquiciado.....prefiero quedarme como estoy y quedarme yo sola con mis tonterias.....muy bueno el post Maestra.....mil besooooos!😘😘😘😘💕

    ResponderEliminar
  2. Nunca olvides que los bebés eligen a las mamás...así que ya se verá qué pasa con los años...quién sabe si algún ser necesita experimentar esa montaña rusa...al fin y al cabo siempre todo está bien sea como sea. Lo importante es SER, sin más ❤️

    ResponderEliminar