A día de hoy el tema del ego es parte fundamental de casi todo, es un tema que parece que se ha puesto de moda y no deja de aparecer por todos lados: artículos, vídeos, libros, talleres, conferencias...
Nunca olviden que todo lo que yo pueda decir, no es más que mi opinión, una opinión más del mundo. Carezco de titulación alguna relacionada con el mundo de la psicología, del coach, y por ello mi intención nunca es imponer mi verdad, porque si algo sé a día de hoy, es que no sé nada, y que no debo olvidarme de puntualizar la expresión "hasta el día de hoy", ya que mañana puede que mi idea sea diferente...no olviden que estamos en continua evolución, aprendizaje, progreso...todo es un proceso, sin más.
Partiendo del punto de que todo es un proceso, seguramente lo que vaya a decir puede que no tenga ningún sentido y que me esté equivocando, pero yo lo siento así, y así se lo transmito...el ego está bien tal y como está, porque si no tuviese que existir, no existiría, ¿no creen? Todo es un proceso, y al final todo estará bien, sino no será el final...
Cada persona es un mundo, vive su experiencia, tiene sus propias creencias, lleva su propio camino recorrido, y no tenemos el derecho de juzgar a nadie...pero eso no quita que yo desde mi experiencia, pueda afirmar que antes mi ego formaba parte de mi inconsciente, y a día de hoy soy consciente de él, y cuando siento que me domina...respiro y me vuelvo a conectar con mi esencia, que siente que no es más que un alma como cualquier otra, que no vivimos para competir, sino que existimos para experimentar, sin más.
La vida no va tan en serio como nos hacen creer, este capítulo de mi vida llamado Cristina, no son más que unas páginas más del libro de mi vida, y lo que no consiga trabajar en esta vida, no se preocupen que ya lo trabajaré en otra. Pero desde lo más profundo de mi ser, sí que siento cuando voy por el camino de la luz, y cuando me desvío, dejándome llevar por mi oscuridad, y siento que mi ego, en muchas ocasiones, no es positivo para mí.
Para mí, no es positivo en el momento en el que consigue dominar mi esencia, intenta imponer mi criterio como el más valido, consigue sacar mi vanidad, mi egoísmo, me hace luchar por tener la verdad, creerme mejor que el prójimo en ocasiones, sentirme mejor si los demás me adulan...en definitiva, si dejo que me domine, pierdo el control, dejándole como dueño y señor de mi ser, y yo no soy solo ego...así que siento que tenemos que convivir todas mis cualidades en armonía y equilibrio.
Y se preguntarán, ¿cómo lo consigues? Pues la respuesta es muy sencilla, siendo consciente de que todos somos seres de luz experimentando una experiencia a través de un cuerpo físico, que nadie es mejor ni peor, que ninguno tenemos la razón, que no hemos venido a competir, sino a convivir, que me acepto como soy físicamente y no dependo de que los demás alimenten mi ego, que no he de imponer mi verdad, porque no la tengo; que he de tratar al prójimo como a mí mismo, con compasión, comprensión, paciencia y amor...y una vez que van conectando de nuevo con esa esencia interior...el ego se debilita, se convierten en observadores; pasan a estar despiertos y atentos al presente; dejan de competir, no intentan poseer la verdad, ya que no necesitan sentir el poder, porque se hacen conscientes de que la verdad absoluta no existe; desaparece ese ansia de ser mejor, de llegar más lejos, porque con existir ya se sienten privilegiados; aceptan lo que les ocurra, y no con resignación, sino con amor; se desvanece la necesidad de mostrar solo la felicidad, ya que se mostrarán tal y como son, sin olvidarse de que encarnados en cuerpos físicos no somos felicidad en estado puro, somos norias emocionales y eso es lo maravilloso de estar vivo, sentir emociones, sean las que sean; se detendrán a pensar que nos pasamos la vida juzgando al prójimo, cuando en realidad puede que aquello que nos molesta tanto de él, sea un reflejo de una parte de nosotros, porque todos somos uno...
Así se darán cuenta de que el ego forma parte de nosotros, igual que puede formar parte el egoísmo, la vanidad, la bondad, el amor...pero que como todo en la vida, los extremos nunca son buenos, siempre es mejor estar en equilibrio, pero que pasar de un extremo a otro tampoco es malo...porque al fin y al cabo...ya volvemos a estar juzgando, ¿no creen?
Que cada uno haga lo que sienta, yo ya les he intentado transmitir mis emociones al respecto, ahora que cada uno se detenga a escucharse, sentirse, observarse...si lo sienten así, sino, sigan en quinta o sexta velocidad, dejándose arrastrar por el exterior...ustedes deciden, pero nunca olviden una cosa, que lo que no trabajen ahora, lo harán en algún momento, este no es más que un capítulo de nuestro libro llamado Vida...y yo sigo aquel dicho que decía: no dejes para mañana lo que puedas hacer hoy.
Pues me gusta mucho este nuevo aspecto del blog.....antes tambien me gustaba....sera porque me havia acostumbrado y lo veia como muy tuyo jajaja pero esta genial! Referente al ego es nuestro enemigo numero 1 creo....es mi opinión....y yo no sé muy bien como controlar eso porque es complicado......no lo veo tan sencillo y lo intento pero......espero poder controlar eso como tú algún dia jajaja muy buen post y un placer leerte como siempre!sigue así Maestra!un besazooo desde Gandia😘❤️
ResponderEliminarNo creas que lo controlo tanto como me gustaría...pero ahora por lo menos soy consciente de él, antes ni me enteraba...y eso ya es mucho! Y estamos para ir evolucionando...pasito a pasito! Un abrazo con los dos brazos bien abiertos
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